Océano&Hortensias
20:46
Me voy a poner un poquito seria con este tema jujuju.
Cuando le dije a un amigo que llamaría mi blog "Océano&Hortensias" me miró con cara de extrañado y exclamó un ¿Por qué?. Cuando estaba pensando en nombres para el blog -soy extremadamente recontra súper hiper mega mala para los namings y todo lo que esto conlleva- terminé con enredos en mi cabeza y simplemente uní dos de las cosas que más amo observar y que considero algo así como "delicadas y fuertes".
Mi mamá hace algún tiempo me comentó que cuando yo era chiquita -en pañales más específicamente- nuestra casa, gloria a Dios, estaba al frente del mar y yo sin vergüenza podía pasar horas viendo y llamando hacia el mar como si lo atrajera. La cosa no ha cambiado de mucho ahora que han pasado dos décadas, no vivo tan privilegiadamente pero a escasos minutos puedo ir, sin contar con el hecho de que cuando visito a mi familia sí o sí paso por un trayecto en donde me puedo deleitar.
Con las hortensias me pasó algo diferente, llevo sabiendo de su existencia desde el 2012 más o menos y las vi por primera vez cuando me mudé a Bogotá en 2013.
Cuando le dije a un amigo que llamaría mi blog "Océano&Hortensias" me miró con cara de extrañado y exclamó un ¿Por qué?. Cuando estaba pensando en nombres para el blog -soy extremadamente recontra súper hiper mega mala para los namings y todo lo que esto conlleva- terminé con enredos en mi cabeza y simplemente uní dos de las cosas que más amo observar y que considero algo así como "delicadas y fuertes".
Mi mamá hace algún tiempo me comentó que cuando yo era chiquita -en pañales más específicamente- nuestra casa, gloria a Dios, estaba al frente del mar y yo sin vergüenza podía pasar horas viendo y llamando hacia el mar como si lo atrajera. La cosa no ha cambiado de mucho ahora que han pasado dos décadas, no vivo tan privilegiadamente pero a escasos minutos puedo ir, sin contar con el hecho de que cuando visito a mi familia sí o sí paso por un trayecto en donde me puedo deleitar.
Con las hortensias me pasó algo diferente, llevo sabiendo de su existencia desde el 2012 más o menos y las vi por primera vez cuando me mudé a Bogotá en 2013.
-Esta fotico la tomé en marzo de este año-
Son flores orientales consideradas como guías espirituales pero aquí en occidente les tienen -o más bien tenían- algo de recelo porque se cree que atraen la muerte y a los muertos.
A mí en realidad me parecen hermosas, son flores que me trasmiten mucha paz y tienen colores preciosos; además que en mi percepción son muy ordenadas ¿saben la cantidad de florecitas que tiene un ramito? y forman circunferencias casi perfectas. Creo que eso es lo que más me gusta de ellas. Crecen en climas fríos y yo vivo en una ciudad más bien con clima infernal, las veo cada tanto que viajo.
No puedo estar en un mundo ideal en donde puedo ver tanto el océano como las hortensias, qué mal. Pero creo que eso es lo chévere, me emociona pensar todas esas cositas que el mundo nos regala con su belleza y que aún no he podido ver. Qué cursi, yo sé.
Un abrazo,
-Smile.
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